El albinismo es un tipo de desorden genético que provoca la ausencia total o parcial de melanina (un pigmento de color oscuro) en ojos, piel y cabello. El albinismo es un trastorno hereditario recesivo, lo cual significa que tanto el padre como la madre deben tener el gen. Cuando el producto adquiere ambos “alelos” entonces se manifiesta el albinismo, pues no basta un solo gen para que este se de.
Los animales albinos, por lo general, no sobreviven mucho tiempo en su medio natural debido a su debilidad ante los rayos solares y a que su falta de color los delata ante sus presas y depredadores. La vida en cautividad es, por tanto, su única salida.
No son muchos los ejemplares albinos que se han podido encontrar, ver o documentar pero entre ellos resaltan:
Gorila Albino
Pavo Real Albino
Búho Albino
Tortuga Albina
Camello Albino
Canguros Albinos
Zebra Albina
Ardilla Albina
Cabe resaltar que en algunas especies es más común el albinismo que en otras, por eso en algunas ocasiones no te parecerá raro ver un animal albino como por ejemplo un perro que tenga el vecino. A algunos nos parecerá que varios de estos animales son hermosos así, pero ellos no lo sienten igual, ya que son rechazados por sus mandas o por otros ejemplares y tienen más probabilidades de sufrir enfermedades como cáncer de piel por la falta de melanina o pigmento en su piel.
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